Impacto del ejercicio en la salud mental
- María Paula Segura Parra
- 19 mar
- 5 Min. de lectura

En un mundo donde el estrés, la ansiedad y la depresión afectan a millones de personas, la búsqueda de estrategias efectivas para mejorar la salud mental se ha convertido en una prioridad. Entre las diversas alternativas, el ejercicio físico ha demostrado ser una herramienta poderosa, respaldada tanto por la evidencia científica como por la experiencia de atletas de alto rendimiento.
Pero, ¿cómo influye realmente el ejercicio en la mente? ¿Qué dicen los expertos y los deportistas sobre sus beneficios? En este artículo, exploraremos el impacto del ejercicio en la salud mental, respaldándolo con estudios recientes y testimonios de quienes han experimentado en primera persona sus efectos transformadores.
Beneficios del ejercicio en la salud mental: lo que dice la ciencia
Reduce los síntomas de ansiedad y depresión
Diversas investigaciones han demostrado que el ejercicio regular puede reducir significativamente los síntomas de la ansiedad y la depresión. Según un metaanálisis publicado en JAMA Psychiatry (Schuch et al., 2018), las personas que realizan actividad física tienen un 26% menos de riesgo de desarrollar depresión en comparación con aquellas que llevan una vida sedentaria.
Esto se debe, en gran parte, a la liberación de neurotransmisores como la serotonina y las endorfinas, conocidas como “hormonas de la felicidad”, que generan una sensación de bienestar y mejoran el estado de ánimo. Además, la actividad física regula el eje hipotalámico-hipofisario-adrenal, reduciendo la producción de cortisol, la hormona del estrés.
Mejora la función cognitiva y la memoria
El ejercicio no solo impacta las emociones, sino también el rendimiento cognitivo. Un estudio realizado por Erickson et al. (2011) demostró que el ejercicio aeróbico promueve la neurogénesis en el hipocampo, una región clave para la memoria y el aprendizaje.
Esto explica por qué la actividad física ha sido recomendada como estrategia de prevención y tratamiento en enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer.
Aumenta la resiliencia emocional
El ejercicio enseña disciplina, tolerancia a la frustración y perseverancia, habilidades clave para afrontar las dificultades de la vida. En deportes como el atletismo o el levantamiento de pesas, los atletas deben superar fracasos y aprender a lidiar con la presión, fortaleciendo su capacidad de recuperación ante situaciones adversas.
Promueve el sueño reparador
El insomnio y los trastornos del sueño son problemas comunes en quienes padecen ansiedad o estrés crónico. El ejercicio puede mejorar la calidad del sueño al regular los ritmos circadianos y aumentar la producción de adenosina, una sustancia que favorece la sensación de sueño (Kredlow et al., 2015).
Un estudio publicado en Sleep Medicine Reviews encontró que el ejercicio regular mejora la latencia del sueño, la duración y la eficiencia, factores esenciales para un descanso reparador.
Fomenta la autoestima y la confianza personal
La actividad física genera una sensación de logro y autoconfianza, ya sea al completar un entrenamiento desafiante, mejorar una marca personal o notar cambios físicos positivos.
Un estudio de Fox (2000) en Health Psychology evidenció que el ejercicio tiene un impacto significativo en la percepción del cuerpo y la autoestima, especialmente en adolescentes y adultos jóvenes.
Testimonios de atletas sobre el impacto del ejercicio en la salud mental

Los deportistas de alto rendimiento han experimentado en carne propia el impacto del ejercicio en la salud mental. A continuación, algunos testimonios que respaldan la importancia del movimiento como herramienta terapéutica.
Michael Phelps: El ejercicio como terapia para la depresión
El nadador olímpico Michael Phelps ha hablado abiertamente sobre su lucha contra la depresión y la ansiedad. En varias entrevistas, ha señalado que el ejercicio ha sido su salvación:
“Hubo momentos en los que no quería seguir adelante, pero cuando me metí a la piscina y nadaba, sentía que todo estaba bajo control. El deporte me ayudó a manejar mis emociones y encontrar un propósito.”
Phelps también ha promovido la importancia de hablar sobre salud mental en el deporte, resaltando que incluso los atletas más exitosos pueden atravesar dificultades emocionales.
Serena Williams: La actividad física como liberación emocional
La tenista Serena Williams ha señalado en diversas ocasiones que el ejercicio le ha permitido manejar la presión y el estrés de la competencia:
“Cuando entreno, libero todas las tensiones acumuladas. Me ayuda a sentirme fuerte no solo físicamente, sino también mentalmente. El deporte me ha enseñado a ser resiliente y a manejar la adversidad con determinación.”
Williams ha destacado que la actividad física es su forma de autocuidado, permitiéndole encontrar equilibrio entre su carrera profesional y su vida personal.
Novak Djokovic: Conexión entre cuerpo y mente
El tenista Novak Djokovic ha integrado el ejercicio con prácticas de mindfulness y respiración, destacando cómo la actividad física puede ayudar a alcanzar un estado mental óptimo:
“El movimiento es esencial para el bienestar mental. Cuando corro o juego, siento una conexión profunda entre mi cuerpo y mi mente. El deporte me ha enseñado a estar presente y a manejar mejor la ansiedad.”
Djokovic ha compartido que su rutina de entrenamiento no solo se enfoca en mejorar su rendimiento físico, sino también en fortalecer su salud emocional.
Cómo integrar el ejercicio en tu vida para mejorar tu bienestar mental

No es necesario ser un atleta profesional para beneficiarse del ejercicio. Incluir actividad física en tu rutina diaria puede marcar una gran diferencia en tu estado emocional y mental. Aquí algunas recomendaciones:
Encuentra una actividad que disfrutes: Puede ser caminar, correr, bailar, nadar o practicar yoga. La clave es que sea algo que realmente te motive.
Establece un horario fijo: La constancia es esencial. Intenta ejercitarte al menos 30 minutos al día, cuatro veces a la semana.
Combina ejercicios aeróbicos y de fuerza: Ambos tipos de entrenamiento tienen beneficios específicos en la salud mental.
Escucha a tu cuerpo: Si sientes fatiga extrema, descansa. El ejercicio debe ser un aliado, no una fuente de estrés.
Busca apoyo profesional: Si no sabes por dónde empezar, contar con la guía de un entrenador personal puede ayudarte a mantenerte motivado y a realizar los ejercicios correctamente.
La evidencia científica y los testimonios de deportistas dejan claro que el ejercicio es mucho más que una estrategia para mejorar la condición física. Su impacto en la salud mental es innegable: reduce el estrés, combate la depresión, mejora la autoestima y potencia la función cognitiva.
Si estás buscando una forma efectiva de fortalecer tu bienestar emocional, considera integrar el ejercicio en tu vida. No necesitas entrenar como un atleta profesional; pequeños cambios pueden hacer una gran diferencia.
Fuentes:
Erickson, K. I., et al. (2011). "Exercise training increases size of hippocampus and improves memory." Proceedings of the National Academy of Sciences, 108(7), 3017-3022.
Fox, K. R. (2000). "The effects of exercise on self-perceptions and self-esteem." Health Psychology, 13(5), 117-131.
Kredlow, M. A., et al. (2015). "The effects of physical activity on sleep: A meta-analytic review." Sleep Medicine Reviews, 24, 10-17.
Schuch, F. B., et al. (2018). "Physical activity and incident depression: A meta-analysis of prospective cohort studies." JAMA Psychiatry, 75(7), 711-722.
Si buscas estrategias personalizadas para mejorar tu bienestar emocional, agenda tu consulta. Juntos podemos trabajar en técnicas basadas en la evidencia para fortalecer tu salud mental y alcanzar un equilibrio en tu vida.
Comments